Nervioso/a al hablar en público

¿Eres de los/as que agachan la cabeza cuando el/la profesor/a dice de salir a la pizarra a hacer un ejercicio, o incluso cuando lanzan una pregunta a la clase? Y, ¿lo de exponer un trabajo ya ni queremos pensarlo?

Ese miedo, la emoción que nos acompaña cuando nos enfrentarnos a una exposición con público es más común de lo que crees. El miedo nos previene de un peligro, pero aquí no hay un verdadero peligro y, como todos los miedos la forma de superarlos es afrontar esa situación.

Con todo esto no queremos que te desanimes, al contrario, vamos a exponer diversas formas para prepararte para dicha situación y puedas afrontarla cada vez con menos miedo y mayor naturalidad, recuerda que somos seres sociales y en muchas ocasiones tendrás que expresarte en público.

Lo principal ante un evento ante un público es conocer el tema del que tenemos que hablar, prepáratelo bien y no lo dejes para el último día, así si surgen dudas podrás aclararlas previamente.

1. Organiza y elabora tu discurso, y sobre todo ten claro el objetivo de aquello que quieras comunicar y no olvides contarlo en tu conclusión.
2. Realiza un guion para no tener que recordarlo ni leerlo todo.
3. Confía en ti, en tus habilidades y el conocimiento que tienes.
4. Trabaja en la situación utilizando la imaginación, representa la situación a la que te vas a enfrentar mentalmente con la mayor precisión que seas capaz, así conseguirás que al realizar tu exposición real el cerebro no crea que es una situación nueva.
5. Practica todo lo que puedas para detectar aquello que haces bien y lo que debes mejorar, puedes aprender a través de tus referentes. Ten presente el uso de los silencios y la entonación, esto generará más interés en lo que estás diciendo y las personas que te están escuchando podrán seguir tu explicación.

Algo muy importante será pasar por alto tus nervios, ya que es normal que nuestro cuerpo se active, aumentando así nuestro ritmo cardiaco y respiratorio, incluso generando sudor y/o provocando un leve temblor todo ello junto con una excitación general, esto nos suele asustar, pero recuerda es solo nuestro cuerpo preparándose para hacer frente a un reto. Por tanto, asume esto como la reacción del cuerpo ante un desafío. Si hablar en público te paraliza, podrás aprender a utilizar técnicas de relajación muscular y/o de respiración para conseguir reducir está activación fisiológica.

¡¡Propóntelo como un reto para este nuevo curso, y olvida juzgarte, si algo no sale como esperabas no dejes de hacerlo, busca la forma de realizarlo mejor la siguiente vez!!

 

Recuerda que la Asesoría Psicológica está a tu disposición.